Juega y aprende​

Los niños son curiosos por naturaleza y exploran el mundo que les rodea, por eso el juego es una forma estupenda de que los niños acumulen experiencias. Establecer formas específicas de jugar puede ser útil, pero mediante el juego abierto los niños pueden explorar a su antojo sin respuestas «correctas» o «incorrectas».

Eso es exactamente lo que es el juego abierto: un juego sin limitaciones predeterminadas ni respuestas fijas, en el que los niños simplemente siguen su imaginación para permitir que el juego vaya en cualquier dirección que les lleve su creatividad. Es una forma de jugar sin planes, sin reglas, sin expectativas, sin problemas concretos que resolver y sin presiones para obtener un producto acabado.

Curiosidad

A través del juego abierto, los niños se encuentran con resultados nuevos e inesperados, lo que les incita de forma natural a hacer preguntas y a buscar la comprensión. Esta curiosidad impulsa el aprendizaje y el desarrollo cognitivo, favorece el crecimiento emocional al fomentar la confianza y la resiliencia, y fomenta las habilidades sociales a través del juego colaborativo y la comunicación. En última instancia, el juego abierto alimenta la curiosidad del niño, una habilidad esencial para el aprendizaje permanente y la adaptabilidad.

Creatividad e imaginación

El juego abierto permite a los niños utilizar su imaginación y ser creativos, dándoles libertad para explorar y crear sin límites predefinidos. Ya sea construyendo un castillo con bloques, creando historias con muñecas o transformando objetos domésticos en nuevos inventos, este tipo de juego anima a los niños a pensar con originalidad. Aprenden a expresarse y a desarrollar ideas únicas, lo que fomenta una rica imaginación y mejora su capacidad de pensamiento creativo.

Capacidad de resolución de problemas

Durante el juego abierto, los niños se encuentran con diversos retos y obstáculos que les obligan a pensar de forma crítica y a resolver problemas; por ejemplo, pueden averiguar cómo equilibrar los bloques para evitar que se caiga una torre. Este proceso de ensayo y error les enseña a analizar situaciones, idear estrategias y adaptar su planteamiento. Como resultado, desarrollan una gran capacidad de resolución de problemas y un pensamiento crítico que son cruciales para su desarrollo cognitivo general.

Promoción de la independencia

El juego abierto fomenta la independencia al permitir que los niños tomen sus propias decisiones y asuman el control de sus actividades lúdicas. Sin directrices estrictas, deciden a qué jugar, cómo jugar y qué objetivos perseguir. Esta autonomía aumenta su confianza al darse cuenta de su capacidad para dirigir sus acciones y tomar decisiones. Con el tiempo, los niños se vuelven más autosuficientes y confían más en sus capacidades, lo que en última instancia mejora su independencia.

Aunque los juguetes abiertos son estupendos, también se pueden utilizar recursos que seguro que tenemos por casa o en la guardería. Un recurso abierto es cualquier objeto que pueda utilizarse de diversas maneras: telas, arcilla, conchas, papel y herramientas para marcar, guijarros, agua, cajas de cartón… ¡Ya te haces una idea!

Carrera hasta la Meta

El juego perfecto para principiantes por sus ilimitadas posibilidades de carrera de canicas. Lleno de giros, caídas y balancines, este juego hará que las canicas corran en todas direcciones. Ideal para el juego independiente o en colaboración, su mini ingeniero aprenderá a resolver problemas y a desarrollar su conciencia espacial y su motricidad fina. A medida que los niños diseñan y construyen sus estructuras, sus cerebros perfeccionan sus habilidades de resolución de problemas. Este proceso fomenta el razonamiento lógico, la conciencia espacial y la predicción de causa y efecto.

Juego de Bloques de Construcción Tren de Ciudad

Súbete a bordo para vivir una divertida aventura en tren por la ciudad. Este juego de cubos apto para viajar está repleto de accesorios como árboles, señales y vagones. La construcción de ferrocarriles es brillante para el trabajo en equipo y proporciona muchas horas de diversión de calidad y juego imaginativo para su pequeño conductor y sus amigos. Su hijo puede descubrir el mundo de la forma que más le convenga, con libertad para elegir a qué y cómo jugar, a la vez que potencia su creatividad y su capacidad para resolver problemas.

Banco de Trabajo de Servicio y Reparación de Vehículos

Un detallado juego interactivo para mecánicos en ciernes. Con un elevador de vehículos, herramientas de reparación y piezas de automóviles, hay muchas piezas para fomentar el juego de rol realista. El juego no sólo estimula la creatividad y la imaginación, sino que también mejora la motricidad fina, la capacidad de resolución de problemas y la interacción social. Al simular que arreglan los problemas utilizando las herramientas, estos escenarios ayudarán a mejorar las habilidades de resolución de problemas de los niños.