Nunca es demasiado pronto para iniciar a los niños en la música. Especialmente si elige juguetes duraderos, versátiles y fáciles de usar como el Picafuerte xilófono Hape. Esta estación de juego multifuncional combina el placer de la música con el reconocimiento del color, además de la diversión de un juego que involucra habilidades manuales y motoras.

A la vista, parece un pequeño banco de madera, ligero, pero resistente, bien pulido y acabado con brillantes acuarelas que resisten la prueba del tiempo. En la parte superior tiene tres agujeros circulares donde colocar las esferas, mitad por encima y mitad por debajo de la superficie del banco. Dado que el diámetro de los agujeros es imperceptiblemente mayor que el de las bolas, golpearlos con las manos o con el martillo es suficiente para hacerlos caer.

Y cuando se caen, aterrizan en el xilófono de abajo, golpean el teclado metálico y generan sonidos armoniosos que el niño disfrutará repitiendo una y otra vez. Con tal simplicidad, este juguete estimula el tacto, la vista y la audición. Sí, es simple pero también brillante. Tanto es así que ha recibido numerosos premios, incluyendo el Cribsie Award 2018 al Mejor Juguete Musical, el Gold Award 2015 en la categoría Eco de Independent Toy en el Reino Unido, y el Golden Rocking Horse 2011 en Alemania.

¿Busca un juguete divertido y educativo que combine música, colores y juego dinámico? Descubra con nosotros todas las características del banco Picafuerte xilófono de Hape.

Golpee las bolas, toque el xilófono, explore los colores

El Picafuerte xilófono es un juguete multifuncional para niños a partir de los 12 meses. Consta de una base de madera maciza con tres agujeros, un xilófono extraíble, tres bolas de colores y un martillo de madera. Concebido para promover el desarrollo de la motricidad fina, el reconocimiento de colores y sonidos, y la motilidad de las extremidades, permite diferentes formas de uso.

La primera y más inmediata es insertar las bolas en los anillos del color correspondiente. A los niños les encanta tocar objetos y aprender a medir su fuerza: por lo tanto, será natural que golpeen las bolas con las palmas de las manos o con el mazo. Al golpear las bolas, las deslizarán hacia abajo como Alicia en la madriguera del conejo. Excepto que, en lugar del País de las Maravillas, esperándolas habrá un teclado de xilófono.

Como nos enseña la ley de causa y efecto, cada acción tiene consecuencias: en este caso, consecuencias tan agradables como los sonidos del xilófono. El instrumento musical atraerá irresistiblemente a los más pequeños. Para que fuera más fácil jugar y explorar, pensamos que lo mejor era hacerlo extraíble. Basta con separarlo y deslizarlo hacia un lado para descubrir el segundo uso del martillo: poderoso cuando golpea las bolas, se vuelve suave en el teclado para generar melodías agradables.

¿Xilófono o Glockenspiel? Es una cuestión de materiales.

Los xilófonos vienen a nuestro rescate siempre que necesitamos una palabra que comience con la letra X. Este nombre peculiar deriva del griego ξύλον (xylon: madera) y φωνή (fono: sonido). Originalmente, el xilófono consistía en barras de madera dispuestas en una fila como un teclado de piano.

En la mayoría de los xilófonos de juguete, las barras están hechas de metal. Por lo tanto, técnicamente, debería llamarse glockenspiel, otra palabra no fácil de pronunciar (a menos, por supuesto, que sea un germano parlante), que significa «campanas que suenan». En general, sin embargo, cuando decimos xilófono, nos referimos a un instrumento de percusión con barras de madera, metal o plástico dispuestas y afinadas como las teclas del piano.

, los xilófonos son muy populares entre los niños, porque resultan fáciles de usar y divertidos. Y para hacerlos aún más atractivos, el Picafuerte Xilófono Hape viene con teclas de arcoíris y todos los juegos divertidos de una estación de juego multiusos.

Un arcoíris musical para explorar notas y colores

Es posible que haya notado que el banco de madera, las tres bolas y el teclado cuentan con un arcoíris de colores coordinados en la escala de gradación. La bola azul encuentra su lugar en el anillo azul, que corresponde con las teclas y decoraciones en la escala cromática de púrpura azul a azul claro. Lo mismo ocurre con las bolas verdes y rojas.

Por supuesto que no es por casualidad: una de las habilidades que sus hijos pueden desarrollar a través del juego es el reconocimiento del color. Y puede ayudarlos diciendo el nombre de los colores en voz alta cuando tocan la pelota correspondiente.

La identificación y el reconocimiento del color son hitos en el proceso cognitivo de los niños. Esta habilidad preescolar puede promover la capacidad de conectar señales visuales y palabras. Por eso, como padres, queremos apoyar a nuestros hijos para que reconozcan los colores y aprendan sus nombres.

Cómo enseñarle colores a su hijo

Los colores pueden afectarnos de varias maneras, influyendo en nuestros estados de ánimo y emociones, apoyando la productividad y la concentración o induciendo un estado de calma y relajación. Ya hemos hablado de la importancia de los colores para el desarrollo infantil. Hoy queremos darle algunos consejos para ayudarle a enseñar colores a sus hijos.

Para entender el concepto de color, los niños deben adquirir una serie de información que los adultos a menudo damos por sentada, pero que involucra diferentes procesos cognitivos. Antes de introducir la idea abstracta del color, es útil asociarlo con objetos concretos que son idénticos en todo excepto en la tonalidad. La variación destaca y aclara inmediatamente el concepto.

El Banco Picafuerte Xilófono ofrece la oportunidad perfecta para introducir espontáneamente colores primarios y gradualmente reflexionar sobre diferencias de tono más sutiles. Las tres bolas son azules, verdes y rojas, colores primarios fáciles de obtener. El teclado del xilófono, por otro lado, es un arcoíris de tonos donde se pueden notar diferencias y similitudes: azul oscuro, violeta y azul claro, rojo, naranja y amarillo, etc.

 Juegue, diviértase y muévase con el Picafuerte Xilófono de Hape

Para resumir, el Banco Picafuerte Xilófono de Hape es una estación de juego resistente pero ligera. Visualmente parece un juguete simple pero llamativo. La forma intuitiva de uso va de la mano con su versatilidad. Los niños pueden tomar las bolas, insertarlas en las aperturas correspondientes y luego golpearlas con el martillo ejerciendo su fuerza. Esta actividad estimula las habilidades cognitivas del niño en varios niveles.

  • Primero, al insertar la forma esférica en el agujero circular, el niño se familiariza con el concepto de forma geométrica.
  • En segundo lugar, el juego requiere la motricidad fina, que es la capacidad de manipular objetos, apretarlos y dejarlos ir. Sentir diferentes texturas, alternar toques suaves y golpes fuertes le enseña al niño diferentes formas de interactuar.
  • Además, cuando se empuja hacia abajo en el agujero, la pelota desaparece de la vista del niño momentáneamente. Como en el juego de escondidas, este movimiento enseña sobre la ley de causa y efecto. Los objetos todavía existen incluso cuando no los vemos: ser conscientes de esto es esencial en la vida cotidiana y apoya el proceso fisiológico de separación de la madre
  • Una vez más: este juguete añade el elemento musical al clásico juego de formas. Al caer, las bolas golpean el teclado del xilófono de abajo, induciendo al niño a explorar el maravilloso mundo de las siete notas. Además de ser una parte integral de nuestra experiencia diaria, la música es una excelente manera de expresar sentimientos, entretiene y promueve el desarrollo saludable del cerebro. En nuestro blog, encontrará varios artículos sobre la importancia de la música en el desarrollo infantil. Eche un vistazo a lo que escribimos sobre el poder calmante y tranquilizador de la música, cómo puede ayudar con la ira, la frustración y la gestión de las rabietas, así como a la hora de acostarse.
  • Finalmente, esta actividad estimula el desarrollo de la coordinación mano-ojo y las habilidades motoras. Además de requerir el uso de dedos, manos y brazos, este juguete hace que el bebé se arrastre, se levante sobre sus piernas y se mueva por la habitación. De hecho, las bolas tienden a rodar, haciendo que el niño camine o se arrastre para recuperarlas.

Irresistible pero resistente, este juego adictivo para niños es seguro desde todos los puntos de vista: las pinturas son a base de agua, los materiales son naturales, ecológicos, no tóxicos e hipoalergénicos. Eche un vistazo a Picafuerte Xilófono en nuestro sitio web y manténgase al día en nuestras páginas sociales.